¿¡DE CUAL DIGNIDAD!?
¿Del aborto, de una muerte digna y de otras?
¡Se quiere hacer creer lo existente de lo no existente!.
En cambio es verdad que gran parte de esta humanidad está inmersa hasta el cuello en el barco de la indignidad y de la corrupción más aberrante.
El hombre de este mundo ya ha perdido, desde hace tiempo la práctica de los más elementales derechos de la vida.
Existe y crece hipertróficamente, el deseo de querer ser, a toda costa, bárbaros y privados de dignidad humana.
El caos ya ha iniciado, y todo se complica en las espirales de la total disolución material, moral y espiritual.
La dignidad humana está agonizando y con ella todos los otros valores que daban un sentido real a la vida.
El Eterno Mutante Jacobo